Jhenery Ramírez
Santo Domingo, RD.
Henry Ferreras es un señor de 52 años que tiene más de seis meses desempleado en República Dominicana. Ha tratado de conseguir un empleo digno porque se siente muy proactivo pese a su edad y tiene altos gastos que cubrir.
Perdió su trabajo a finales del año pasado y por más correos que envía, las llamadas que recibe son muy pocas esperanzadoras.
Él cuenta con vasta experiencia en su área como ingeniero industrial, pero su maestría y sus diplomados no han sido suficientes para que consiga un trabajo, y su “único pecado” ha sido tener más de 40 años.
A Henry lo llamaron de una empresa interesados en su perfil y el primer contacto parecía esperanzador, pero una segunda llamada “a modo confianza” le confirmó que la compañía había decidido buscar una persona “más joven, de algunos 35 años”.
Así como él, se encuentran otros adultos mayores en el país, a los que ahora no les funcionan sus estudios ni sus experiencias porque la prioridad en algunas áreas es la edad.
Sin embargo, hay algunas profesiones o puestos técnicos en los que sí se están requiriendo personas con más de 40 de años, tales como gerentes departamentales, supervisores, telefonistas, orientadores del sector educativo nacional, encargados de contabilidad y de caja y asistentes administrativos, según sondeos realizados por la Asociación Dominicana de Administradores de Gestión Humana (Adoarh).
Otro caso es que algunas empresas solicitaban antes personal joven para “servicio al cliente”, pero ahora han decidido contratar trabajadores con edad más avanzada para tratar con sus usuarios.
Con estas informaciones surge la pregunta ¿Qué harán esos candidatos que su preparación es en áreas diferentes y por la edad no están siendo contratados?
La presidenta de Adoarh, Neida Iglesias, entiende que hoy en día debe haber una reinvención y estas personas pueden ver más allá del trabajo que siempre han tenido, poniendo en marcha los talentos adquiridos.
“Estos dones que se nos han dado a simple vista es difícil determinarlos en ocasiones, pero si se busca, todos y cada uno de nosotros tenemos algo que ofrecer al mundo”, explica Iglesias como representante de la Adoarh.Martha Curiel, quien también es miembro de la directiva de Adoarh como vocal, y es reclutadora de personal en Santiago, indica que en esta provincia también donde más las empresas solicitan trabajadores de más de 40 años son en las áreas de contabilidad y administración.
Adultos mayores y Covid
La Organización Internacional del Trabajo (OIT) recomendó a las empresas en mayo de 2020, cuando apenas empezaba la pandemia, ayudar a los trabajadores mayores a mantener sus empleos, no por una cuestión de compasión, sino para no perder un recurso valioso.
La especialista técnico principal del departamento de Investigación de la OIT, Carla Henry, sugirió que los países en el contexto de la crisis del Covid-19, tomen la iniciativa y propicien una licencia por enfermedad, licencia familiar remunerada y seguro de salud a través de programas gubernamentales en vez de dejar estas medidas a discreción de los empleadores mayores de 55 años.
Henry agrega en un artículo de opinión publicado en el blog de la OIT que después de la gran recesión de 2007-2009, las tasas de desempleo de los trabajadores jóvenes y de los trabajadores de edad avanzada se dispararon, ya que muchos perdieron su empleo estable y se encontraron en una situación más precaria con menores ingresos, pero los trabajadores mayores necesitaron más tiempo para encontrar un nuevo trabajo.
La experta recuerda que los trabajadores de edad avanzada han acumulado una experiencia de competencias a lo largo de la vida, por lo que cuando el mundo regrese totalmente al trabajo en el contexto del Covid-19 no se debe olvidar el considerable valor de sus conocimientos para los empleadores y para la economía.
Fuente: www.listindiario.com
